Como era dicho ya, el tratamiento operativo ostrovospalitelnyh de las enfermedades de las vías biliosas no ha recibido todavía el reconocimiento general de los cirujanos. Desde este punto de vista la diagnosis así llamada operativa de estas enfermedades tiene el valor pequeño. Si es necesario ocuparse de esto también, habitualmente cuando es emprendida la intervención que no toca esperado ostrovospalitelnoy al proceso en la vesícula biliar, y toca a cualquier otra enfermedad aguda en la cavidad abdominal, y sobre la operación se descubre que el proceso inflamatorio sale de las vías biliosas.
La diagnosis operativa de la colecistitis aguda complicada por la peritonitis se reduce al establecimiento ostrovospalitelnogo del proceso en la vesícula biliar como la fuente de esta peritonitis. A veces ya el carácter de la exudación en la cavidad abdominal, la impureza en ella en grado variable de la hiel, con la evidencia testimonia el carácter de la peritonitis y obliga al cirujano buscar la perforación o hasta la ruptura de las vías biliosas. Se sabe que más a menudo perfora la vesícula biliar (en Vilyamsa — en 91 %), en particular su fondo, es relativamente raro (4,4 %) — el conducto hepático general y, al fin, en la última vuelta — vesical canal (3,3%). Ya que en la abrumadora cantidad de los casos el decúbito de la pared del borbotón como resultado de la presión es una piedra por la causa de la perforación, el cirujano a la operación puede encontrarlo con soltura que está en la cavidad abdominal.
En los casos en que a la laparotomía se descubre, el exudado purulento o seroso y purulento, la tarea del cirujano es establecer que el proceso inflamatorio en la vesícula biliar o los conductos, y no en otro órgano cualquiera de la cavidad abdominal (el estómago, el duodeno, el vástago vermiforme) es la causa de esta peritonitis.
La diagnosis operativa de la colecistitis aguda se funda, claro, en aquellos cambios por parte de la vesícula biliar, que consigue descubrir a laparotomii. Está claro que para esto es necesario en primer lugar llegar a la vesícula biliar.
La mayoría de las veces funciona bien con bastante facilidad, pero con todo eso a veces después de la apertura de la pared abdominal el cirujano encuentra el absceso saculado, sobre que fuente de educación tiene solamente la suposición, puesto que por el miedo romper las concrescencias debe limitarse habitualmente por la apertura del absceso, negándose a las búsquedas de su fuente. Cuando el acceso a la vesícula biliar es bastante fácil, la presencia de los cambios evidentes inflamatorios de último da al operador la confianza que el cuadro clínico, en que razón se emprende la operación, es condicionado por el proceso inflamatorio en la vesícula biliar. Por otro lado, la operación debe recordar que hasta al cuadro bien manifestado clínico de la colecistitis aguda no es obligatoria la presencia de los cambios grandes inflamatorios por parte de la vesícula biliar.
Se sabe que la burbuja así llamada congestiva a que todos los fenómenos inflamatorios se limitan solamente a las conglomeraciones de burbujas pequeñas y no frescas ya con las telas que rodean pueden dar el cuadro de la colecistitis aguda.
Vale la pena recordar, así como la hinchazón aguda del hígado, la hepatitis aguda, puede dar el cuadro de la colecistitis aguda, por eso en algunos casos a la operación debe limitarse solamente konstatirovaniya el color aumentado, denso, gris del hígado. Al fin, a la operación de la colecistitis aguda es necesario recordar que el cuadro clínico es dado, como era indicado, las molestias colelíticas y biliosas.