La colitis ulcerosa (CU) se considera una enfermedad autoinmune. Con los trastornos autoinmunes, su sistema inmunológico se altera y ataca a su propio cuerpo en lugar de defenderlo de infecciones y enfermedades.
La principal anomalía que causa la inflamación en la colitis ulcerosa es una respuesta exagerada de las células T que provoca hinchazón y úlceras en la capa interna del intestino grueso. El desequilibrio entre las células T, un tipo de glóbulo blanco esencial para el sistema inmunitario, y las células asesinas naturales provoca la secreción de muchas sustancias químicas en el intestino que dañan las células del revestimiento.
Si bien se desconoce la causa exacta de la CU, varios factores pueden contribuir a la afección.
Los genes heredados pueden causar el desarrollo de CU:
Su intestino alberga muchos tipos de bacterias que lo mantienen saludable. Una dieta deficiente y el uso excesivo de antibióticos u otros medicamentos pueden disminuir la cantidad de bacterias buenas y desencadenar la CU. Las interacciones anormales entre las bacterias de la gripe estomacal y las bacterias intestinales buenas también pueden dañar las células intestinales debido al mecanismo autoinmune.
Su intestino tiene su propio sistema inmunológico, que se mantiene a través de un tipo de glóbulo blanco llamado IgA. Muchos médicos creen que la mejora del saneamiento en los países industrializados reduce la exposición a las infecciones intestinales durante la infancia. Si no ha estado expuesto a tales infecciones, su sistema inmunitario intestinal no está lo suficientemente entrenado y la maduración del sistema inmunitario de la mucosa intestinal está restringida. Esto puede causar un ataque de CU debido a una respuesta inmunitaria inapropiada a algo como la gripe estomacal.
Las infecciones recurrentes por Salmonella, Shigella y Campylobacter y ciertos medicamentos (AINE, píldoras anticonceptivas) pueden desencadenar colitis ulcerosa. Una infección intestinal aguda puede provocar cambios en el entorno intestinal, desencadenando el inicio de un proceso inflamatorio crónico en personas genéticamente predispuestas.
Si le han diagnosticado CU, es posible que le resulte más fácil comer comidas más pequeñas y más frecuentes en lugar de unas pocas comidas grandes durante el día. Comer una dieta balanceada de frutas frescas, vegetales al vapor, carbohidratos simples y suplementos nutricionales puede ayudarlo a mantener su intestino saludable.
Los estudios han encontrado que los siguientes alimentos pueden ayudar a aliviar la inflamación intestinal y reducir los síntomas de la CU:
Los siguientes alimentos pueden irritar el intestino:
Algunos han encontrado beneficios al llevar una dieta baja en FODMAP, que son carbohidratos altamente fermentables que se encuentran en carnes, frutas, lácteos y muchos otros alimentos.
Para comprender mejor qué dieta es adecuada para usted, lo mejor es hablar con un dietista.