Una dieta alta en azúcar podría ser uno de los principales culpables de una mayor incidencia de enfermedad inflamatoria intestinal (EII), según un estudio de investigación reciente.
Un nuevo estudio publicado en Science Translational Medicine encontró que el azúcar, especialmente la glucosa contenida en el jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, puede ser un contribuyente clave a un mayor número de casos de EII.
Hasan Zaki, Ph.D., profesor de patología y un grupo de investigadores de UT Southwestern analizaron cómo el azúcar afecta el tracto gastrointestinal de los ratones. El equipo alimentó a un grupo de ratones con una dieta alta en azúcar y descubrió que estos ratones desarrollaron una colitis más intensa, un tipo de afección intestinal inflamatoria.
Una dieta alta en azúcar también afectó el revestimiento protector del intestino. El equipo de investigación descubrió que el azúcar promovía el crecimiento de bacterias dañinas para el intestino que causaban un adelgazamiento del revestimiento mucoso protector del intestino e iniciaban la inflamación. Además, el azúcar provocó la disminución de bacterias buenas como Lactobacillus (Medical Xpress ).
Colitis es un término general para un colon inflamado. Puede causar síntomas como dolor abdominal, diarrea crónica y sangrado rectal. La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) se refiere a dos condiciones específicas:la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa.
La EII es más común en los países occidentales y esto puede deberse a malos hábitos alimenticios. La dieta occidental contiene altas cantidades de azúcar, grasas y proteínas animales, que pueden inflamar el tracto gastrointestinal. ¿Existe un vínculo entre la invención del jarabe de maíz con alto contenido de fructosa en la década de 1960 y el creciente número de casos de EII? El Dr. Zaki cree que es una gran posibilidad. “Nuestro estudio muestra claramente que realmente hay que cuidar la comida”, dijo.
El Dr. Zaki planea continuar con su investigación y estudiar cómo el azúcar puede afectar el desarrollo de otras afecciones inflamatorias como la obesidad, la enfermedad del hígado graso y la enfermedad de Alzheimer.
Investigaciones anteriores muestran que los cambios en la dieta pueden afectar profundamente el microbioma intestinal. Sin embargo, algunas personas tienen más riesgo de EII. Algunos de los factores de riesgo de la EII incluyen:
La EII no diagnosticada puede causar daño permanente a su tracto digestivo y aumentar su riesgo de cáncer de colon. Si experimenta síntomas de EII, llame a su médico y programe una cita para evaluar sus quejas. Su médico puede derivarlo a un gastroenterólogo que podría programar una colonoscopia. Durante una colonoscopia, un gastroenterólogo evaluará la salud de su colon durante la colonoscopia y diagnosticará afecciones como EII, diverticulitis o pólipos en el colon (que pueden extirparse y prevenir el desarrollo de cáncer de colon). Si es necesario, puede comenzar un plan de tratamiento de inmediato.
Resuelva hacer de la salud del colon una prioridad en este nuevo año. Prevenir la enfermedad del colon es más fácil y menos costoso que el tratamiento, así que llame hoy mismo a San Antonio Gastroenterology Associates.