La diverticulitis es una inflamación de un divertículo y/o divertículos (una bolsa o sacos anormales formados en un punto débil en la pared del tracto gastrointestinal). La inflamación de un divertículo causa dolor y alteración de la función intestinal. Los signos y síntomas de la diverticulitis incluyen los siguientes:
Los síntomas más graves incluyen fiebre, sensibilidad abdominal, abdomen hinchado y formación de fístulas.
Las causas de la diverticulitis son infecciosas (bacterias que causan inflamación) y/o no infecciosas (alimentos o semillas que causan erosión e inflamación cuando quedan atrapados dentro de un divertículo). Sin embargo, la diverticulitis no es contagiosa.
Para que ocurra diverticulitis, un individuo debe tener divertículos desarrollados en sus tractos gastrointestinales. No hay evidencia de que el desarrollo de divertículos sea contagioso. Los tratamientos médicos, por ejemplo, metronidazol (Flagyl), ciprofloxacina (Cipro, Cipro XR, Proquin XR), amoxicilina y ácido clavulánico (Augmentin), y muchos otros pueden curar algunos episodios de diverticulitis, pero los divertículos pueden volver a infectarse y/ o irritada con agentes que causan inflamación. Desafortunadamente, la diverticulitis puede reaparecer. Una vez que se forman los divertículos, se convierten en estructuras de por vida a menos que se extirpen mediante cirugía.
Durante un ataque de diverticulitis, se indica a los pacientes que solo consuman una dieta de líquidos claros (caldo, gelatina, líquidos claros sin pulpa). Para ayudar a prevenir más problemas, se recomienda seguir una dieta rica en fibra o una dieta vegetariana, ya que se asocian con la reducción del riesgo de enfermedad recurrente. Las comidas deben incluir panes integrales, pastas, frutas y verduras frescas. Existe cierta controversia sobre qué alimentos evitar:se recomienda evitar las palomitas de maíz, el maíz, los alimentos con semillas y las nueces, pero no hay datos adecuados para respaldar esta recomendación.
Se ha pensado que hasta el 20% de las personas con diverticulosis desarrollarán síntomas relacionados con la diverticulosis, principalmente diverticulitis; sin embargo, el estudio más reciente sugiere que la incidencia está más cerca del 5%.
Los signos y síntomas más comunes de la diverticulitis incluyen:
El diagnóstico preliminar generalmente se realiza mediante el historial de síntomas de la persona y el examen físico. Una tomografía computarizada se considera uno de los mejores métodos para confirmar el diagnóstico de diverticulitis. A menudo se realizan análisis de sangre para ayudar a diagnosticar complicaciones de la enfermedad.
La diverticulitis se cura (o entra en remisión) cuando se resuelven los síntomas descritos anteriormente. Esto ocurre después de que se eliminan los factores causantes de la inflamación, por lo que el dolor de la diverticulitis puede durar horas o días. En consecuencia, es importante iniciar tratamientos antibióticos temprano. Los síntomas generalmente comienzan a remitir en alrededor de 2 a 4 días.
Sin embargo, además de la infección por bacterias, existe otro posible factor causante de la inflamación (obstrucción por alimentos o semillas y/o irritación del tejido en los divertículos). En esta situación, la remisión de los síntomas depende de la resolución exitosa de la inflamación. La cirugía también puede ser necesaria con diverticulitis infecciosa grave. Aproximadamente del 15 % al 25 % de los pacientes que tienen su primer episodio de diverticulitis necesitarán cirugía para tratar la enfermedad.