Es posible que la colangitis biliar primaria (CBP) no sea una enfermedad de la que haya oído hablar, pero esta enfermedad autoinmune es más común de lo que cree. De hecho, aproximadamente 1 de cada 1,000 mujeres mayores de 40 años están lidiando con este tipo de enfermedad hepática progresiva, y aunque algunos hombres desarrollan PBC, esto se informa con mayor frecuencia en mujeres. Aquí encontrará todo lo que desea saber sobre la enfermedad hepática, cómo vivir con CBP y cómo tratarla.
Si bien esta afección progresiva afecta al hígado, en realidad es un trastorno autoinmune. Esto significa que el sistema inmunológico está atacando los conductos biliares. Cuando los conductos biliares se dañan o destruyen, se produce inflamación y cicatrización (cirrosis) del hígado.
Al igual que con la mayoría de las condiciones, los síntomas no suelen ser evidentes durante las primeras etapas. A medida que avanza la condición, una mujer puede comenzar a notar síntomas. Esta es una enfermedad lenta, a veces tarda hasta 20 años en aparecer los síntomas.
Algunos de los primeros signos de advertencia son fatiga y picazón en la piel. Con el tiempo, las mujeres también pueden desarrollar,
Dado que muchas mujeres con PBC no experimentan síntomas, es importante que visite a su médico regularmente para chequeos y análisis de sangre de rutina. Un análisis de sangre del hígado de rutina puede detectar enzimas hepáticas elevadas, lo que puede llevar a su médico a realizar más pruebas.
Si bien la PBC no es curable, su gastroenterólogo puede brindarle un tratamiento que puede ayudar a retrasar la progresión de la enfermedad. Uno de los tratamientos estándar es el ácido ursodesoxicólico, que ayuda a que la bilis fluya desde el hígado hasta los intestinos. También se recetan otros medicamentos para mejorar la función hepática.
Si le preocupa la CBP o si tiene preguntas sobre este trastorno autoinmune, su gastroenterólogo puede brindarle información más detallada, incluidas las opciones de tratamiento y el pronóstico.