El páncreas es un órgano del sistema digestivo que se encuentra detrás del estómago y es responsable de producir insulina, así como una serie de otras enzimas y hormonas digestivas. El páncreas juega un papel clave en el mantenimiento de niveles saludables de azúcar en la sangre y la digestión; sin embargo, si el páncreas libera estas enzimas prematuramente, esto puede irritar e inflamar el páncreas, lo que lleva a una afección conocida como pancreatitis.
Los síntomas variarán dependiendo de si se trata de pancreatitis aguda o crónica. Si tiene pancreatitis aguda, es probable que experimente,
Las personas que experimentan varios episodios agudos de pancreatitis pueden desarrollar suficiente daño como para volverse tan grave como la pancreatitis crónica. Las personas con pancreatitis crónica también experimentarán dolor en la parte superior del abdomen, así como pérdida de peso inesperada o heces aceitosas.
Hay muchas razones por las que las personas pueden desarrollar pancreatitis. Ciertos factores de riesgo incluyen:
La forma en que su gastroenterólogo decida tratar su pancreatitis dependerá de la gravedad y el tipo de pancreatitis que esté tratando. Las formas leves o agudas de pancreatitis pueden mejorar con simples cambios en la dieta (una dieta baja en grasas) o con antibióticos y analgésicos.
Para los casos severos o crónicos de pancreatitis, es posible que los pacientes deban ser hospitalizados donde deberán someterse a ayuno hasta que desaparezca la inflamación. A veces, es necesaria la cirugía para extirpar la vesícula biliar si los cálculos biliares son la causa de la inflamación. La cirugía también puede extirpar regiones enfermas del páncreas.
Si tiene dolor abdominal intenso o persistente, debe buscar atención médica inmediata, incluso si no está seguro de si tiene pancreatitis. Si sospecha que sus síntomas pueden deberse a una pancreatitis, un gastroenterólogo será el mejor especialista al que acudir para un diagnóstico y plan de tratamiento.