La cirugía de colitis ulcerosa es el último y más invasivo método para controlar la colitis ulcerosa, y es posible que en realidad no cure al paciente de la enfermedad, aunque ciertamente aliviará los síntomas. La cirugía de colitis ulcerosa es un procedimiento quirúrgico durante el cual se extirpan las partes afectadas del colon, el intestino grueso y el recto para eliminar la propagación futura de la enfermedad. Si bien la colitis ulcerosa a menudo se puede controlar con medicamentos y ajustes en la dieta, la cirugía es la única opción para los pacientes que sufren síntomas debilitantes con la enfermedad.
El problema es que los profesionales médicos y los dietistas no siempre pueden ponerse de acuerdo sobre los alimentos y bebidas que inflaman la enfermedad, y tres médicos diferentes pueden dar tres opiniones muy diferentes sobre la colitis ulcerosa. Algunos pacientes sienten que la cirugía es su única opción para experimentar alivio del dolor y la incomodidad.
Antes de someterse a cualquier tipo de cirugía, es importante familiarizarse con el procedimiento. Hable extensamente con su médico sobre la duración de la cirugía, los efectos posteriores, qué sospechar durante los días y semanas posteriores a la cirugía y qué hacer si los síntomas persisten. Su médico estará encantado de analizar su caso particular de colitis ulcerosa y repasar todas las opciones de tratamiento.
La cirugía de colitis ulcerosa real implica la extirpación de partes del colon, el intestino grueso y el recto, lo que puede tener diversos efectos secundarios dependiendo de la cantidad de tejido que haya que extirpar. Algunas personas pierden tanto intestino grueso que tendrán que vivir el resto de sus vidas con una coleostomía, que es cuando el intestino se desvía fuera del estómago y el paciente debe llevar consigo una bolsa para recoger cualquier excremento.
La cantidad limitada de intestino grueso en el cuerpo da como resultado la incapacidad del cuerpo para absorber los nutrientes a la velocidad adecuada. El paciente deberá tomar vitaminas todos los días y probablemente tendrá dificultades para aumentar de peso.
También se requerirá cirugía si se crean perforaciones, o agujeros, en el colon o el intestino grueso para eliminar el exceso de toxinas en el sistema, o si el médico teme que el paciente tenga un mayor riesgo de cáncer de colon.
La cirugía de colitis ulcerosa es un procedimiento de cuatro a seis horas, después de lo cual el paciente generalmente permanecerá en la UCI (unidad de cuidados intensivos) durante un período de días hasta que los médicos estén seguros de que no queda ningún daño duradero y dañino en el colon o el intestino. Es posible que se requiera que el paciente use una bolsa de coleostomía durante varios días, semanas o meses después de la cirugía para permitir que el intestino y el recto cicatricen.
Luego, el paciente deberá permanecer bajo la estrecha observación de su médico para asegurarse de que ninguna otra parte del colon, el intestino grueso o el recto se vea afectada por la cirugía. Si se extirpa todo el intestino o el colon, es posible que se requieran otras cirugías o procedimientos.
Consulte con su médico acerca de los posibles remedios para la colitis ulcerosa antes de comprometerse con la cirugía. Si es necesario, o si le tranquiliza, obtenga una segunda opinión antes de programar la cirugía.